En el mundo empresarial de México, la implementación de metodologías eficientes se ha convertido en una necesidad para lograr un crecimiento sostenible y una ventaja competitiva en el mercado. Te presentamos algunas de las últimas metodologías en el mercado mexicano que están ganando popularidad entre las empresas.
- Design Thinking:
Esta se enfoca en la resolución de problemas a través de la empatía y la comprensión profunda de las necesidades y deseos de los clientes. Se basa en un proceso iterativo de investigación, definición del problema, ideación, prototipado y prueba. Ha demostrado ser especialmente útil en la creación de nuevos productos y servicios innovadores.
- Agile:
Se originó en el desarrollo de software, pero se ha expandido a otros sectores empresariales. Se focaliza en la entrega rápida y continua de productos y servicios mediante un enfoque de equipo colaborativo, interactivo y centrado en el cliente. También se basa en los principios del Manifiesto Ágil, que incluyen la entrega temprana y continua de software, la colaboración con el cliente y la respuesta al cambio.
- Lean Startup:
Se guía en la creación de empresas y productos innovadores de forma rápida y económica. Se apoya en la validación temprana de ideas y la reducción del desperdicio mediante la implementación de un ciclo de aprendizaje iterativo llamado “construir-medir-aprender“. El objetivo es maximizar el valor creado para el cliente y minimizar los riesgos y costos.
- Six Sigma:
Se encamina en la mejora continua de la calidad mediante la eliminación de defectos y la reducción de la variabilidad en los procesos empresariales. Se fundamenta en el uso de herramientas estadísticas y un enfoque riguroso de resolución de problemas llamado DMAIC (definir, medir, analizar, mejorar y controlar). Esta se ha utilizado con éxito en la industria manufacturera y de servicios.
- Kaizen:
Está dirigida en la mejora continua de los procesos empresariales a través de pequeñas mejoras graduales. Se apoya en la participación activa de los empleados en la identificación y resolución de problemas. Está centrada en la eliminación de desperdicio y la maximización de la eficiencia en los procesos.