¡Ahora fabricar materiales en el espacio es lo del futuro que lo cambiara todo! 

La razón por la que en la Estación Espacial Internacional (EEI o ISS por su sigla en inglés) parece no haber gravedad es que la velocidad a la que orbita en torno a la Tierra es lo suficientemente alta para provocar la aparición de una fuerza lateral, así como de una aceleración centrípeta, que compensan el tirón gravitacional del planeta. Si la EEI no se estuviese moviendo, o no lo hiciese a la velocidad necesaria, no tendría otra opción que caer hacia el centro de masas de la Tierra, pero la velocidad a la que se desplaza es suficiente para mantenerla en caída libre. 

Hasta ahora, en su interior se han realizado cientos de experimentos de todo tipo; de hecho, la EEI ejerce como laboratorio de experimentación científica. Algunas de las disciplinas que se están beneficiando de la experimentación en microgravedad son la biología, la ingeniería de materiales, la física, la farmacología o la medicina, pero viene mucho más. 

“Cuando eliminas la gravedad de cualquier ecuación ocurren fenómenos que no se pueden reproducir en la Tierra […] En las mezclas como no se generan corrientes de convección por cambios de densidad o temperatura todo ocurre por pura difusión. Si quieres mezclar algo y pones una capa de material y otra capa de un material diferente encima vas a obtener una estructura perfecta. Los átomos quedarán donde los coloques. No se van a producir interacciones, ni convecciones, ni corrientes que generen impurezas. El nivel de calidad de los nuevos materiales y las nuevas aleaciones metálicas que es posible poner a punto en estas condiciones es muy alto”. 

                                                         Sara García Alonso, astronauta española. 

Lo que acaba de explicarnos es el punto de partida de la idea que han tenido varios grupos de investigación pertenecientes a la NASA, la Agencia de Exploración Aeroespacial Japonesa, el Departamento de Energía de EE. UU., el Laboratorio Nacional Argonne (EE. UU.) o la Universidad de Nuevo México (EE. UU.), entre otros. Y es que estos científicos se han dado cuenta de que en condiciones de microgravedad es posible fabricar materiales que no se pueden obtener en los laboratorios de la Tierra, como nos ha explicado Sara García Alonso. 

Conclusión

En el artículo que han publicado en Nature npj microgravity aseguran que han descubierto que en microgravedad es posible fabricar nuevos tipos de vidrio que pueden ser empleados en dispositivos ópticos de próxima generación. “Nuestro propósito es explorar los mecanismos detrás de la fabricación de nuevos materiales en el espacio, lo que nos puede conducir a la creación de materiales que no están necesariamente disponibles en la Tierra”, asegura Jörg Neuefeind, que es uno de los científicos que están involucrados en este interesantísimo proyecto. 

Sin duda estamos pisando un futuro en donde lo que más comúnmente consumimos o los materiales que garantizan nuestro bienestar y protección sean realmente garantizados y confiables ante cualquier situación de emergencia que se presente o, simplemente, obtener artículos, tratamientos, medicamentos, etc. del espacio como algo normal 🚀⚽   

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